En la Franja la producción es casi nula

Por Donald Macintyre

Las fuerzas israelíes utilizaron bombardeos aéreos, disparos de tanques y topadoras blindadas para eliminar la capacidad productiva de algunas de las más importantes plantas fabriles de Gaza durante los 22 días de acción militar en la Franja de Gaza. Los ataques, como los que destruyeron unos 20 mil hogares, dejaron algunas áreas residenciales destruidas como por un terremoto y más de 50 mil personas en albergues temporarios. Además destruyeron y dañaron 218 fábricas, dicen los industriales palestinos.

Los líderes de la comunidad empresaria de Gaza –que se mantuvieron al margen de las distintas facciones políticas palestinas– dicen que gran parte del 3 por ciento de la industria que todavía operaba después de los 18 meses de bloqueo económico de Israel, ahora está destruida. Chris Gunness, el vocero de la agencia de Ayuda Humanitaria de la ONU, dijo que la gran destrucción de “infraestructura económica civil” era un ataque al “corazón del proceso de paz”. La agencia está presionando a los donantes de los 345 millones necesarios para la reparación inmediata de hogares todavía en pie y para sus propias instalaciones dañadas.

Amr Hamad, gerente ejecutivo de la Federación palestina de Industrias, dijo: “Lo que no consiguieron con el bloqueo, lo lograron con las topadoras”. “Los empresarios no están conectados para nada con Hamas y son muy pragmáticos y abiertos mentalmente. Son la última capa en la sociedad palestina que cree en la paz y en la importancia de la economía. También creen que el único vínculo económico debería ser con Israel”, agregó Hamad.

En el molino de Al Badr en Sudaniya, el propietario, Rashed Hamada, dijo que la empresa estaba haciendo harina de trigo para las panaderías hasta el ataque del 18 de enero. Niega enfáticamente que su complejo haya sido usado por los hombres armados de Hamas y dice que es obvio que la línea de producción había sido el blanco. Parecía que el padre del comandante “hubiera sido el dueño del molino –comentó irónicamente–. Sabía exactamente dónde atacar. Los israelíes solían alentarme para expandir la producción aquí. Ahora la han destruido. No entiendo por qué”. Parado entre las ruinas de su fábrica de alimentos y los depósitos, el doctor Alweyda dijo que no solo las líneas de producción sino 26 vehículos habían quedado destruidos. La empresa era la única fábrica de productos lácteos, y había logrado mantenerse en funcionamiento hasta el comienzo de la guerra.

Mientras, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, al comienzo de la reunión de gabinete dijo que el gobierno daría asistencia y apoyo a los oficiales de las fuerzas israelíes en los casos en que se enfrentaran a juicios por supuestos crímenes de guerra cometidos en Gaza. “Los comandantes y los soldados que fueron enviados a Gaza deben saber que están amparados y seguros en cualquier investigación que se lleve a cabo”, anunció Olmert al comienzo de la reunión de gabinete.

Hay una creciente preocupación en el Ministerio de Defensa y en el de Justicia de que oficiales israelíes sean señalados en una ola de juicios por supuestas violaciones a los derechos humanos durante la reciente ofensiva de 3 semanas contra Hamas. “Ahora, después de la operación, las organizaciones están tratando de arreglar cuentas con el Estado de Israel y lo está haciendo en la arena de la ley internacional.”

El ministro de Defensa, Ehud Barak, se unió a Olmert para pedir apoyo por los soldados. Diciendo que el ejército israelí es “el ejército más moral del mundo”, Barak dijo que las tropas recibirían apoyo del gobierno contra acusaciones del exterior. Olmert añadió que las organizaciones terroristas están tratando de convertir a los atacantes en atacados al echarles la culpa a los soldados de las fuerzas de defensa en lugar de culpar al terrorismo. También dijo que el ministro de Justicia, Daniel Friedmann, consultaría con los principales expertos legales de Israel y encontrarían “respuestas a posibles preguntas relacionadas con las actividades militares israelíes durante la campaña”.

Más de 1250 palestinos murieron durante la ofensiva israelí con Hamas en el territorio de la costa. Israel fue duramente criticado por causar un gran número de muertes civiles en Gaza.

*De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.

Alberto Arce: «La sensación de los palestinos es que los han dejado solos ante Israel»

«Han muerto 1.400 palestinos y 4 israelíes, pero resulta que los terroristas son los primeros» Alberto Arce aterrizó ayer en España procedente de Gaza donde...
Alberto Arce aterrizó ayer en España procedente de Gaza donde, a lo largo de las últimas semanas, ha vivido en primera persona el ataque de las fuerzas israelíes sobre Palestina. La labor desarrollada por este periodista y cooperante gijonés fue recriminada desde Israel que, de hecho, intentó su captura. De vuelta en Gijón, Arce relata sus experiencias, que se recogerán en un largometraje documental que comenzará a elaborar la próxima semana a partir de las cuarenta horas de grabación que ha filmado en la zona de conflicto.

-¿Qué llevó a Alberto Arce a involucrarse en una guerra como
esta?

-Yo fui allí porque quise y sabía dónde me metía. Nadie me obligó. Mucha gente sabe que llevo años trabajando sobre el tema de Palestina. He sido deportado de Israel y he logrado entrar y salir de Gaza sin pasar por Israel.

-Ha sido perseguido e incluso se ha convertido en objetivo del ejército israelí. ¿Tanto ha molestado su actitud?

-La pregunta es por qué he sido el único que ha estado en el área de conflicto. Simplemente, he ofrecido un enfoque totalmente diferente de la versión oficial.

-¿A qué se refiere?

-Uno tiene que elegir si quiere informar de verdad o cumplir con las normas. Si uno decide ésto último, puedo asegurar que no tiene ningún problema para seguir al otro lado de la frontera. Un cooperante en la franja está ilegal, según el Gobierno israelí.

-¿Qué le sirvió como medio de protección?

-El hecho de que Israel sabía que había una cierta credibilidad en las crónicas que mandaba desde la zona. Que la embajada en España de Israel diga que soy un activista pro Hamás o que se hayan dedicado a decir tonterías sobre mí no me sorprende. Han tratado de desacreditarme.

-¿Simpatiza con Hamás?

-En absoluto. Ni soy, ni he sido ni seré nunca un defensor de Hamás. Como joven laico y de izquierdas no siento ninguna simpatía por un movimiento religioso y conservador. Hamás ha demostrado que no tiene respeto por los derechos humanos ni a los principios democráticos.

-¿Cómo supo que era un objetivo del ejército israelí?

-Supe que las autoridades israelíes habían difundido mi foto y mis datos para lograr mi captura o, por lo menos, conseguir información sobre mi paradero. Este interés demostraba que estábamos haciendo bien las cosas.

-Siendo objetivo de Israel, ¿cómo fue posible su salida de Gaza?

-Gracias a la labor de la embajada española en el Cairo, el consulado español en Jerusalén y al Ministerio de Asuntos Exteriores. Sólo tengo palabras de agradecimiento por todo lo que han hecho. Gracias a su mediación he logrado sacar las cuarenta horas de grabación que filmé durante días.

-Desde su punto de vista, ¿cómo vivió el pueblo palestino el ataque militar de Israel?

-Palestina lleva sesenta años resistiendo los ataques israelíes. No es diferente lo que ha ocurrido durante las últimas semanas de lo que han sufrido a lo largo de décadas. Quizás, cuantitativamente, ha sido más fuerte, pero puedo asegurar que cualitativamente no. El pueblo palestino lo lleva con resignación. No quiero que se interprete como un mensaje propagandístico, pero ellos siguen teniendo fe en su dios y en un espíritu de resistencia muy grande.

-¿Tienen cierta sensación de aislamiento?

-La sensación es que la comunidad internacional los ha dejado solos. Estos mismos países han demostrado estar más escorados hacia los intereses de Israel que a defender la justicia con Palestina.

-¿A qué atribuye esa actitud?

-Hay un contexto de islamofobia y guerra contra el terror. Todo lo que huele a musulmán es visto como una amenaza y han difundido que el derecho legítimo de Palestina a defenderse es visto como un acto terrorista. Es decir, lo que hizo la resistencia francesa ante los nazis fue heróico y lo que ahora hace Palestina es terrorismo. En los últimos días, han fallecido 1.300 palestinos y 4 israelíes por acción de los misiles kasam y resulta que los terroristas son los palestinos.

-¿Hay algún rayo de esperanza en el futuro de Palestina?

-A día de hoy ninguno. Hay una sensación de abandono, pero no de derrota. El pueblo palestino tiene la voluntad de seguir luchando.

-Fuera de Palestina, ¿piensa que se comprenden las razones y las causas que los han llevado a enfrentarse a Israel?

-No lo sé. Lo que tengo claro es que la comunidad internacional no ha entendido que el problema de Palestina no es humanitario, sino político. No es un problema que se arregle con dinero. No han sufrido un tsunami ni un terremoto. Lo único que quiere Palestina es que se abran los pasos fronterizos y puedan empezar a trabajar.

-El pasado martes fue investido Barack Obama como nuevo presidente de Estados Unidos. ¿Puede cambiar el rumbo de la historia con el pueblo palestino?

-En absoluto. Con el nombramiento como secretaria de Estado de Hillary Clinton se constata que habrá una línea de continuidad. Ya por no hablar de su jefe de Gabinete, un ex soldado israelí muy vinculado con todo lo que ocurre en el país hebreo. Lo cierto es que los palestinos sólo creen en ellos mismos.

Yo, artillero, usé fósforo blanco

Simcha Leventhal
Il Manifesto
Serví como artillero en la división M109 del ejército israelí desde 2000 hasta 2003 y recibí instrucción para utilizar las armas que Israel está usando en Gaza. Sé a ciencia cierta que las muertes de los civiles palestinos no son una desgracia desafortunada sino una consecuencia calculada. Las bombas que el ejército israelí usó en Gaza matan a todo aquel que se encuentre en un radio de 50 metros de la explosión y hieren casi seguro a quienes se hallan a 200 metros. Conscientes del impacto de estas armas, las jerarquías militares impiden su uso, incluso en combate, a menos de 350 metros de distancia de los soldados amigos (250 si se encuentran en vehículos acorazados).
Los testimonios y fotografías de Gaza no dejan lugar a dudas: el ejército israelí usó en esta operación bombas de fósforo blanco, que formaban parte del arsenal cuando yo servía en el ejército. El derecho internacional prohíbe su uso en áreas urbanas densamente pobladas debido a las quemaduras graves que provocan: la bomba explota unas decenas de metros antes de tocar el suelo con el fin de aumentar los efectos, y manda 116 trozos de metralla incendiada de fósforo en una área de más de 250 metros. Durante nuestra instrucción, los comandantes nos dijeron que no llamáramos a estas armas “fósforo blanco”, sino “humo explosivo” ya que el derecho internacional prohíbe su uso.
Desde el principio de la incursión, veía las noticias con rabia y disgusto. Me estremece el hecho de que soldados de mi país disparen artillería pesada contra una ciudad densamente poblada, y que usen municiones de fósforo blanco. Tal vez nuestros grandes escritores ignoren cómo funcionan estas armas, pero nuestras jerarquías militares bien que lo saben. 1.300 palestinos han muerto desde que comenzó el ataque y más de 5.000 resultaron heridos. Según las previsiones más optimistas, más d ella mitad de los palestinos muertos eran civiles que se vieron en medio del fuego cruzado. Cientos de ellos eran niños. Nuestros dirigentes, conscientes de las consecuencias de la estrategia de guerra que adoptaron, sostienen con cinismo que cada una de esas muertes fue un accidente desgraciado.
Quiero ser claro: no ha habido ningún accidente. Quienes deciden usar artillería pesada y fósforo blanco en una de las áreas urbanas más pobladas del mundo saben perfectamente, como yo sabía, que muchas personas inocentes estaban destinadas a morir. Puesto que conocían de antemano los resultados previsiles de su estrategia de guerra, las muertes civiles en Gaza de este mes no pueden definirse honestamente como un accidente desgraciado.
Este mes he asistido a la erosión ulterior de la estatura moral de mi ejército y mi sociedad. Una conducta moral requiere que no sólo se anuncia la voluntad de no herir a civiles sino que se adopte una estrategia de combate consecuente. Usar artillería pesada y fósforo blanco en un área urbana densamente poblada y sostener después que se mató a los civiles por error es inmoral y ultrajante.

Fuente: http://www.ilmanifesto.it/archivi/fuoripagina/anno/2009/mese/01/articolo/285/?tx_ttnews[backPid]=16&cHash=27f6759410

Entrevista a Suad Amiri, escritora palestina y directora del Riwad Center for Architectural Conservation de Ramalá

La rabia de Ramalá y la poquedad de la Autoridad Palestina
Giuliana Sgrena
Il Manifesto
¿Cuál ha sido la reacción de los palestinos de Cisjordania ante la masacre perpetrada por Israel en Gaza?, le preguntamos a la escritora palestina Suad Amiri, fundadora y directora del Riwad Center for Architectural Conservation, de Ramalá, que se encuentra actualmente en Roma para presentar su último libro No sex in the city.
Durante dos días todos los palestinos estuvimos pegados a los televisores, sin ir siquiera al trabajo, paralizados ante las imágenes transmitidas por la emisora Al Jazeera. Desde el comienzo ha habido una gran solidaridad humana, al margen de la política. La política ha comenzado a emerger con la entrevista concedida por el líder de Hamás Khaled Meshal, desde Damasco, que con un tono muy arrogante invitaba a manifestarse en favor de Hamás. Este llamamiento ha alarmado a las autoridades palestinas. Además, en esos momentos Abu Mazen se hallaba de viaje en el extranjero y, erróneamente, no ha vuelto enseguida.
La gente estaba enmudecida ante los hechos, pero ¿cuándo ha comenzado a salir a la calle?
Desde la primera noche, el 27 de diciembre, en que hubo una manifestación con antorchas, todas las iglesias suspendieron sus ceremonias. El día después, a la una de la tarde, sin ninguna convocatoria, nos hemos encontrado en la calle, en el centro de Ramalá. Estaban todos los partidos con sus banderas, pero no había ningún líder político. Había mucha policía, y cuando desde el checkpoint de Bireh comenzaron a llegar un centenar de militantes de Hamás, entre ellos muchas mujeres, con sus banderas, la policía quiso bloquearlos, pero los demás grupos lo han impedido gritando eslóganes unitarios. Hubo quien propuso retirar las banderas de partido y llevar sólo la palestina. Hubo pequeños enfrentamientos entre Hamás y Al Fatah, debidos a viejas querellas. Había mucha depresión, hasta que Amal Khresche, ex militante comunista, consiguió revivir los ánimos gritando eslóganes unitarios, y así, tras ella y con las mujeres en las primeras filas, una manifestación recorrió la ciudad.
Pero en la televisión hemos visto a la policía atacando a los manifestantes.
Sí, los jóvenes que querían dirigirse al checkpoint donde estaban los israelíes han sido bloqueados, golpeados y algunos arrestados.

¿Por qué no había ningún líder político?
Porque en Palestina no hay ningún liderazgo. Al Fatah se ha desintegrado, como resultado, en primer lugar, de los ataques y los bombardeos de Israel contra Arafat en 2002-2003, y, en segundo lugar, de la guerra civil desencadenada en Gaza.
La gente estaba en la confusión: la impresión era que Abu Mazen no quería oponerse, y sólo después de cinco días éste ha convocado a todos a manifestarse y ha impuesto la participación de los funcionarios públicos. La brutalidad de Israel era contra el pueblo palestino, y la solidaridad era con nuestro pueblo, no contra Hamás.
Sin embargo, el problema de las ayudas es urgente, y hay quienes proponen una fuerza de control en la frontera egipcia…
Israel ha conseguido desviar la atención del bloqueo del paso fronterizo de Erez, debía haberse levantado tras el acuerdo de la tregua con Hamás, al bloque de los túneles, que en cambio había tolerado. Europa, con su bloqueo impuesto al pueblo palestino, ha adoptado una actitud estúpida, y ahora propone controlar el paso de Rafah en lugar de hacerlo con el paso de Erez, que es el lugar de donde provienen todos los productos consumidos por los palestinos. Así, toda la presión se transfiere a Egipto, como si el responsable no fuese Israel.
¿Cuál es el futuro de Abu Mazen?
No podrá seguir en el poder sin un proceso de paz que, por otra parte, Hamás ha eludido. Quizás la elección de Obama pueda ayudar; el modo de pensar en el mundo puede cambiar a partir de la gran potencia. De no ser así, serán los islamistas fundamentalistas los que ganarán terreno porque son los únicos que resisten a la ocupación, y los jóvenes sólo conocen este modo de resistencia. Nosotros, los laicos, hemos perdido los instrumentos para dar sostén a una causa justa, no hemos articulado un modo de resistencia que no sea violento, la resistencia pacífica es considerada en Israel como violencia, y es reprimida como ésta; el precio a pagar es demasiado alto.

Pero, ¿quiere Israel el proceso de paz?
No, estoy convencida que Israel quiere apoderarse de toda nuestra tierra, pero como no puede echarnos al mar debe hacer todo para hacernos sentir derrotados. He aquí el objetivo declarado por diferentes exponentes políticos y militares israelíes: humillarnos e institucionalizar el sistema del apartheid.
S. Seguí pertenece a los colectivos de Rebelión y Cubadebate. Esta traducción se puede reproducir libremente a condición de respetar su integridad y mencionar el nombre del autor y el del traductor, y la fuente.

http://www.ilmanifesto.it/il-manifesto/argomenti/numero/20090128/pagina/11/pezzo/240683/

Para seguir construyendo el nuevo vocabulario una definición de ANTISEMITA según los parámetros israelíes modernos:

"Antes, un antisemita era aquel que odiaba a los judíos, pero ahora es aquel que los judíos odian."
Saquen sus conclusiones.
HU: ¿Podría actuar el lobby judío contra los judíos con conciencia?
GA: Buena pregunta, pero no soy ningún experto en tácticas del lobby judío. Dicho lo cual, soy muy consciente de su influencia. Mientras que la economía británica laborista esté dirigida por un sionista rabioso como el mercachifle Lord Levy o el jefe de gabinete de la Casa Blanca sea otro sionista rabioso, tendremos que esperarnos que los intereses sionistas controlen nuestra realidad y eso significa muchos conflictos, matanzas y sangre de civiles inocentes.
Sin embargo, hemos de tener en cuenta que la marea está cambiando. Lo que vemos y escuchamos en Gaza está dando lugar a una indignación masiva contra Israel y sus lobbies en todo el mundo. No puedo saber lo que harán los lobbies judíos contra Erdogan, probablemente lo presentarán como su nuevo protagonista antisemita. Ya sabemos que no hace falta mucho para llegar a serlo. Antes, un antisemita era aquel que odiaba a los judíos, pero ahora es aquel que los judíos odian.

La entrevista completa en:

http://www.tlaxcala.es/pp.asp?reference=7014&lg=es

“Con la excusa del antisemitismo se criminaliza el repudio hacia Israel»

Entrevista a Laura Ginsberg, por Pablo Montanaro
“Los ojos de la humanidad miran y acompañan a las víctimas masacradas en Gaza y repudian las políticas terroristas del Estado de Israel en esa región”, afirmó Laura Ginsberg, integrante de la Agrupación por el Esclarecimiento de la Masacre Impune de la AMIA (Apemia), acerca del extenso y complejo conflicto entre árabes e israelíes que recrudeció nuevamente causando la muerte de centenares de muertos y miles de heridos. La Mañana de Neuquén conversó con ella, quien perdió a su marido durante el atentado a la mutual judía, y cobró relevancia cuando pronunció aquel emotivo y justiciero discurso bajo la frase “Yo acuso”, en el que denunció las supuestas complicidades del gobierno de Carlos Menem, la DAIA y la Justicia argentina por la falta y la demora en investigar y esclarecer el atentado, ocurrido el 18 de julio de 1994.

¿Cuál es su reflexión acerca del conflicto en Gaza?
Ni bien empezó este conflicto desde la agrupación Apemia nos pronunciamos repudiando la masacre en Gaza, repudiando el silencio de Naciones Unidas que no tomó ninguna medida efectiva durante los días posteriores al bombardeo, y denunciando al gobierno argentino que tampoco tuvo una medida concreta de solidaridad con las víctimas del pueblo palestino. Las Naciones Unidas en conjunto, y en particular el papel del Estado argentino, ha sido deplorable.

¿Por qué?
Después de observar cómo se fueron desarrollando los hechos nos enteramos de que el silencio del gobierno argentino no era para nada inocente. La masacre sirvió para que el Estado argentino reforzara los vínculos políticos y económicos que venía construyendo con el Estado de Israel desde hace tiempo. Así promulgaron la Ley 26.437 el 13 de enero pasado en el más absoluto silencio. Ésta es una ley donde se establece que nuestro país dará apoyo financiero para proyectos de desarrollo industrial y/o tecnológico entre ambos estados. Entre las condiciones que aparecen en la ley se incluye que los resultados que devengan de este tipo de proyectos de cooperación tienen que ser confidenciales. Sabemos que los fuertes del desarrollo tecnológico industrial en Israel tienen relación con la industria de la guerra y la seguridad. La conclusión cae por sí sola. Vamos a financiar el desarrollo del complejo industrial-militar israelí, en el nombre de la cooperación entre la actividad científica y la iniciativa privada.

¿Cuáles son los antecedentes de esta ley?
El acuerdo que dio base a esta ley se firmó en Israel en noviembre de 2006, y poco tiene que ver con antecedentes científicos. Se firmó poco después que el gobierno nacional se sumara a los reclamos del primer ministro israelí, Ehud Olmert, y de la canciller Tzipi Livni para inculpar a Irán. El gobierno nacional, entonces, avaló los pedidos de captura para los funcionarios iraníes acusados de ser responsables del atentado a la AMIA. Al momento de firmar este acuerdo, Livni expresó que “por fin se hizo justicia en la Argentina”, concretando así las bases para esta cooperación llamada “científica”.

Cuando menciona la palabra encubrimiento, de inmediato uno lo relaciona con el tema de la causa AMIA.
Por supuesto… Hasta los jueces reconocieron el papel de encubridor que jugó el Estado nacional. Por otra parte, existe una sociedad política de encubrimiento que el Estado argentino ha tejido con el de Israel durante casi quince años y que se sigue consolidando y reforzando, en momentos en que Israel desata una agresión terrible contra el pueblo de Gaza. El gobierno nacional no condenó el ataque de sus socios. Después de veintidós días de bombardeo y tras negar la existencia de una ola antisemita en nuestro país, Kirchner, la DAIA y las embajadas de Israel y los Estados Unidos llegaron a un acuerdo, no para condenar la masacre sino para perseguir a los que protestan contra ella, en nombre de un supuesto brote de antisemitismo.

Es un hecho grave que ha originado múltiples reflexiones y posiciones.
Es muy grave en el siguiente sentido. En la Argentina no ha habido manifestaciones antisemitas, ni agresiones a instituciones judías, ni a individuos por su origen judío, como sí los hubo antes y durante la dictadura y con las bombas en la Embajada de Israel y en la AMIA.
Por supuesto que la brutal agresión del gobierno encabezado por el primer ministro israelí Ehud Olmert en Gaza ha despertado manifestaciones de repudio en la Argentina como en muchos países del mundo. En estas condiciones, el gobierno pretende utilizar la excusa del “antisemitismo” para judicializar y criminalizar la protesta social que repudia a la política del Estado de Israel en Gaza. En este punto debemos ser claros porque hay un reclamo por parte de la dirección de la DAIA, y de las embajadas de Estados Unidos y de Israel, que el gobierno de la presidenta Cristina Kirchner concedió, para judicializar la protesta contra esta política y decir que cualquier manifestación en donde se repudie este accionar es un acto antisemita. Nosotros defendemos la libertad de expresión.

También ha habido discusiones en cuanto al tema de la posición de los israelíes frente al conflicto. Algunos sondeos señalan que el 90 por ciento de la población civil está de acuerdo con lo hecho por el Estado de Israel.
Ha habido manifestaciones en la ciudad de Tel Aviv en las que ciudadanos israelíes tanto de origen judío como árabe se manifestaron en contra de las políticas de Olmert. Ha habido individuos que se conocen como los objetores de conciencia, soldados convocados que forman parte del Ejército israelí, que se han negado a cruzar la frontera para ir a territorios palestinos a matar gente en Gaza y que han padecido las consecuencias que eso implica en su país. Existe una porción de población que habita en Israel que no está de acuerdo. Por cierto que es una porción minoritaria la que ha repudiado estas políticas y que no alcanzan para cambiar el rumbo. Pero es un segmento importante. Esos ciudadanos israelíes saben que las consecuencias de estas políticas van a caer sobre sus propias espaldas. El historiador uruguayo Gerardo Liebner, que vive en Tel Aviv, señaló que repudiar la política del actual gobierno israelí no es ser antisemita, sino que es algo legítimo y una forma de apoyar de verdad al futuro democrático de la sociedad.Precisamente... Esto también es parte de una confusión muy generalizada. Pareciera ser que no se puede opinar sobre cuáles son las políticas de Israel en Medio Oriente mientras sí se puede opinar sobre las políticas de Estados Unidos en el mundo, sobre las políticas del gobierno argentino o de las que se implementan en otros países del mundo. Pero existe un silencio deliberado y una prohibición deliberada que surge sistemáticamente de la dirección de la DAIA, de la embajada de Israel e incluso del propio embajador argentino en los Estados Unidos, Héctor Timerman, quien mandó a bajar los decibeles de este debate. Es de una gravedad tal que las consecuencias van a ser padecidas por generaciones. Más que nunca debemos explicar que lo que ha ocurrido en la Argentina respecto de judicializar y de limitar las expresiones contra las políticas del Estado de Israel fue una instrucción que la canciller israelí Livni mandó a decir a todas las naciones del mundo. Es necesario manifestarse en este sentido, tratar de aclarar y explicar que no estamos viviendo un “tsunami antisemita” como dijo hace unos días el escritor Marcos Aguinis.

¿Resulta exagerado hablar de un nuevo holocausto?
Las políticas que el gobierno de Olmert y Livni llevan adelante en la Franja de Gaza son políticas de terrorismo de Estado. Nosotros nos solidarizamos con las víctimas del terrorismo de Estado en la Argentina, en Israel y en cualquier parte del mundo. Con la bomba en la mutual judía hemos sido víctimas del terrorismo de Estado argentino que sabía que la bomba se venía y que puso todas sus fuerzas de seguridad y de inteligencia al servicio de la comisión del atentado y después colocó a los tres poderes del Estado al servicio del encubrimiento. En cuanto a si resulta exagerado hablar… es parte de una discusión. Le recuerdo que fue un funcionario del gobierno de Israel el que prometió hace meses una nueva Shoá (holocausto).

Videos

* Vídeo del testimonio de una niña palestina superviviente en Zeitún
Prólogo y traducción de subtítulos al castellano de Manuel Talens. También subtítulos en francés.
Al-Jazeera Kaos. Solidaridad con Palestina 29-1-2009
http://www.kaosenlared.net/noticia/81784/video-testimonio-nina-palestina-superviviente-zeitun

* Video. Reportaje fotográfico tomadas en Gaza. Su contenido es extremadamente crudo. De poco valdría que se hiciesen, a posteriori, exposiciones sobre "el sufrimiento del pueblo palestino", como se hacen sobre el holocausto del pueblo judío, o las consecuencias de la bomba de Hiroshima. Entendemos que este tipo de imágenes hay que difundirlas cuando sirven para intentar evitar que esa realidad continúe. Por eso, porque pueden servir para tocar el corazón de mucha gente, te pedimos que ayudes a difundirlas. http://www.futuros21.info/detalle_multimediacf.asp?id_multimedia=54

*Audio y video desde Gaza.
http://audio.urcm.net/Alberto-Arce-desde-Gaza-la-noche
http://www.dagaza.org/

En conferencia de prensa, los trabajadores de FM 93.5 denunciaron actos de censura y el cierre de la emisora.

(Buenos Aires, 4 de febrero) Con la sala del Hotel Bauen (recuperado por sus trabajadores) desbordada de un público solidario, los trabajadores que representan a los 60 programas que albergaba Radio FM 93.5 "La Voz Sudamericana", denunciaron a los directivos de Radio Colonia, Mauro Viale y Mario Kaminsky por censura y presiones insólitas contra el personal periodístico para que no hablaran objetivamente sobre la agresión sionista contra el pueblo de Gaza."Viale y Kaminsky ordenaron, el 19 de enero pasado, a nuestros trabajadores abandonar el local de la radio en un término de dos horas y rescindieron el contrato de alquiler que teníamos con Radio Colonia para gestionar FM “La Voz Sudamericana”, dijo uno de los directivos de la radio ahora fuera del aire, Marcelo Köenig. El motivo es muy simple: varios programas de "La Voz..." dieron cabida a testimonios e informes sobre la masacre que los soldados israelíes cometieron contra la población civil de Palestina ocupada. Junto a Köenig, se encontraban en la conferencia de prensa, la dirigente de las Madres de Plaza de Mayo, Línea Fundadora y los periodistas de la radio, Omar López (del programa "Mate Amargo") y Carlos Aznárez (de"Resumen Latinoamericano"). Además, se hallaban presentes numerosos trabajadores y trabajadoras de prensa de la radio censurada y también, varios dirigentes de organizaciones sociales y populares, además de oyentes que se hicieron presentes para solidarizarse enfáticamente con los afectados. Desde la mesa se denunció al lobby sionista que "hoy presiona para encubrir el genocidio que han producido sus soldados, y en su afán de callarlas voces de protesta, llegan a amenazar a funcionarios y hasta al propio Gobierno argentino, con la excusa del antisemitismo en el que ya nadie cree". Además, se reclamó la necesidad de una Ley de Radiodifusión nueva que termine para siempre con la impuesta por la dictadura, que lamentablemente hoy sigue vigente y que permite que "los holdings comunicacionales que responden a un discurso reaccionario y antidemocrático puedan decidir sobre la voluntad mayoritaria de los argentinos". No faltaron acusaciones contra "los cercenadores de la libertad de expresión Mauro Viale y Kaminsky", quienes, se dijo, "en los años de la dictadura eran cómplices de aquella, y ahora, pretenden atropellar los derechos de los trabajadores, defendiendo a otra dictadura, en este caso la del sionismo que asesina a mansalva y con total impunidad".Varios trabajadores de "La Voz..." hablaron señalando la necesidad de seguir con la lucha y planteándose el rescate del grupo de trabajo surgido de la radio, para poder construir un nuevo espacio democrático y soberano a nivel de los medios de comunicación. Como parte de la continuidad de la protesta, los trabajadores realizarán en los próximos días radios abiertas para seguir denunciando este atropello que reconoce pocos antecedentes en la historia de los medios radiales argentinos.
Entre las múltiples adhesiones recibidas se destacaron las de la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA),la del escritor y periodista Osvaldo Bayer, el Movimiento Evita, el Frente Transversal Nacional y Popular, la Agencia de Noticias Paco Urondo, el Frente Barrial 19 de Diciembre, la Corriente Nacional Martín Fierro, el periódico Resumen Latinoamericano, el Colectivo de Educación y Comunicación Popular "Mate Amargo", Generación por la Emancipación Nacional, Asociación Argentina de Solidaridad con Palestina, Juventud Peronista, el Comedor Los Pibes, el embajador de Palestina en Argentina, Farid Suwan y el Sheij Mossen Ali, del Comité de Solidaridad con los Pueblos agredidos por el Sionismo y el Imperialismo. También se solidarizaron las Organizaciones Libres del Pueblo, el Comité de Medios de Carta Abierta, Peronismo 26 de Julio, el Movimiento Libres del Sur, la Asociación de Documentalistas (DOCA), Asociación Civil Martín Castellucci, las Cátedras Bolivarianas, La Culturoza, Sudestada, Ojo Obrero, Contraimagen, Cine Insurgente, Mascaró Cine Americano, Adoquín Video Digital, Grupo Boedo Films, FM La Boca, Corriente Eva Perón, Revista La Memoria de Nuestro Pueblo, el Cuerpo de Delegados del Personal de Aerolíneas Argentinas(Aeroparque) y otras organizaciones populares.

Niños bajo fuego Por Oscar Taffetani

APe).- “-¿Cómo te llamás? // -Zaki. // -¿Qué edad tenés? // -Siete. // -¿Vive tu padre? // -Murió. // -¿Qué era tu padre? // -Fedaí (combatiente). // -¿Qué vas a ser cuando seas grande? // -Fedaí...”

Así transcribía Rodolfo Walsh, en un reportaje para el diario Noticias publicado en 1974, su diálogo con un niño palestino alojado en una escuela para huérfanos al sur de Beirut.Cualquiera podría pensar que el perfil y las expectativas de los niños palestinos, 35 años después de aquel reportaje de Walsh, no ha cambiado.

Pero sí ha cambiado. Ha cambiado de un modo terrible. Porque hoy los niños palestinos -y muy especialmente los que viven en la sitiada y devastada Franja de Gaza- no tienen expectativa alguna de llegar a ser adultos.

Niños bajo fuego

Saben que morirán muy pronto, víctimas de las bombas o los francotiradores, o del hambre y las pestes que proliferan en ciudades sitiadas y colapsadas. En el mejor de los casos -piensan- morirán combatiendo. Combatiendo al mismo enemigo de sus padres y sus abuelos. Para reunirse en el Cielo con ellos.

Abdel Aziz Mousa Thabet, el más importante psiquiatra infantil radicado en Gaza, que ha venido estudiando los efectos de la violencia y de las secuelas post-traumáticas de la guerra en los niños palestinos, a lo largo de 20 años, dice que un 65% de esos niños presentan severos desórdenes y alteraciones en su comportamiento.

“Dolores de cabeza y estómago -describe Mousa Thabet- vómitos, incapacidad para concentrarse, pánico, ansiedad, irritabilidad. Quieren irse de aquí, pero no saben a dónde. Los oigo. Sienten que no quedan esperanzas, que el mundo no va a hacer nada por ellos y que ellos mismos no podrán hacer nada para cambiar su situación...” (The Guardian, 7/01/2009)

“Esa experiencia traumática -concluye el psiquiatra-, combinada con otras, los empuja a comportamientos extremos”.

La fotografía -que dio la vuelta al mundo- del niño Mohammed al-Dura, de 13 años, muerto a tiros por los soldados israelíes mientras su padre intentaba vanamente protegerlo, ha quedado grabada a fuego en la conciencia de los palestinos. Los adultos ven reflejada en esa foto toda la inhumanidad de la máquina de matar israelí. Sin embargo, los niños -observan los psicólogos- la ven distinto. Para ellos, lo que la foto muestra es que sus padres no son capaces de protegerlos.

Otro psiquiatra de ese enorme laboratorio de dolor y desesperanza que es la Franja de Gaza, Eyad Sarraj, ha dicho este domingo que los cientos de niños huérfanos que han dejado los bombardeos, se convertirán rápidamente, estos días de la tregua, en milicianos de Hamas. “Un niño que ha visto cómo su padre ha muerto o no lo puede defender -dice Sarraj- buscará a alguien que sea su protector, en este caso, otra facción armada, que le dará seguridad, dinero y posibilidad de venganza. El círculo de violencia se ampliará”.

Así están las cosas en el Oriente Próximo, donde la vida de niños, mujeres y trabajadores palestinos sin casa, sin tierra y sin futuro, es apenas una gota roja de sangre, despreciada, mil veces borrada, sistemáticamente ignorada por los que mandan.

La neta... no hay futuro

Una directora y productora de documentales argentina radicada en México, Andrea Gentile, presentó en 1987 el cortometraje de 26 minutos titulado “La neta (es decir, lo concreto, la verdad)... no hay futuro”.

Gentile tomó a un grupo de chicos pobres que a cambio de monedas limpiaban parabrisas de automóviles en las calles del Distrito Federal. Cinco o seis años después, se preguntó qué había sido de cada niño de ese grupo, al entrar en la adolescencia y juventud. La respuesta, que constituye el núcleo del documental, fue que la gran mayoría de ellos, en unos pocos años, ya estaban muertos o desquiciados, triturados por la injusticia del sistema.

Ese mismo documental de Andrea Gentile podría haberse filmado en las calles del Conurbano bonaerense, en las del gran Córdoba o el gran Rosario, con idéntico resultado e idéntico mensaje.

Porque lo concreto -la posta, la pura verdad- es que nuestros pibes, lo mismo que los del DF mexicano y que los niños palestinos de Gaza, no tienen futuro. No tienen futuro entendido éste como el desarrollo de la personalidad y de las potencialidades de un individuo. No tienen futuro entendido como progreso de la vida en el seno de una comunidad.

En 2008, los resultados de una encuesta encargada por el Ministerio de Desarrollo Social a jóvenes de entre 15 y 20 años, en el Conurbano bonaerense, dejaron sin habla a los funcionarios.

Un 35% de esos pibes -como se publicó en la tapa de algunos diarios- pensaba que en los próximos cinco años estaría “muerto o excluido”; un 30%, que tendría un “trabajo precario”. Sólo el restante 35% tenía expectativas de “cumplir con su vocación”.

No hay dos lecturas posibles para esa encuesta. Los hijos de la pobreza perciben claramente esa realidad que luego se encargarán de demostrar, con datos verificables, las estadísticas policiales y carcelarias y los informes y denuncias de las organizaciones de derechos humanos.

Armados de esperanza

Un hilo invisible, una red silenciosa y secreta, une las hambres y los llantos, las agonías y profundos deseos de la mayor parte de la humanidad.

Dentro de esa red, lo más invisible, lo imperceptible, un quejido sepultado por el estrépito de las bombas y los discursos del poder, son los niños.

No tienen futuro, porque se lo robaron. No están en las previsiones oficiales. No están en las planillas ni en la imaginación de los funcionarios.

Sin embargo, son dueños de la Esperanza. Todos juntos, ellos, los masacrados y los ignorados, los rebeldes y los imperceptibles, los que resisten los bombardeos con fósforo o con hambre o con indiferencia, son dueños de la Esperanza.

Ellos, los niños combatientes -que nunca debieron serlo-, los guerreros del arco iris, son capaces de amasar para la humanidad un pan que todavía no conocemos, brillos que no sospechamos, una gran epopeya que aún no ha sido escrita.

Saludemos a esos niños, ángeles terribles. Si alguna vez habrá paz -paz duradera y justa- será por ellos. Si alguna vez habrá pan y caricias en la mesa de todos, será por ellos.

Historias del genocidio en Gaza:

Ciudad de Gaza: "Papá, me muero"

Uruknet Para Kaos en la Red 19-1-2009 www.kaosenlared.net/noticia/ciudad-de-gaza-papa-me-muero

Las palabras todavía resuenan en los oídos de Kamal Awaga, sacudiendo de dolor su cuerpo herido y débil. Estas fueron las últimas palabras pronunciadas por su hijo de 9 años, Ibrahim, antes de que él terminara sirviendo como blanco para ejercicio de tiro de los soldados israelíes. " Ellos mataron a mi hijo a sangre fría, " dice el padre desconsolado, todavía en estado de shock.
Ibrahim se sumó a los más de 350 niños masacrados por Israel en su ataque de tres semanas sobre el enclave costero. Pero mientras los otros cayeron víctimas de balas asesinas o terriblemente bombardeados, el destino de Ibrahim resultó aún más trágico. Un batallón de soldados israelíes hizo una práctica de disparos con él.
"Los israelíes no tuvieron clemencia con su inocencia " dijo el desconsolado padre en su cama en el hospital Al--Shefa en la Ciudad de Franja de Gaza. " Ellos no tuvieron nada de compasión con su diminuto cuerpo , " añadió el padre afligido.

Un día soleado

Nada en el día hacía prever a la familia Awaga el trágico giro de los acontecimientos que se desarrollaron. Ellos se despertaron una mañana soleada después de días de encierro en un pequeño cuarto para protegerse del masivo bombardeo israelí.

"Mamá, vayamos a desayunar hacia fuera en el jardín. Estoy harto de permanecer en este cuarto," dice la apenada madre recordando el pedido de Ibrahim.

Una hora más tarde, la mesa estaba puesta en el jardín y la familia esperaba disfrutar de los raros momentos de paz, inconsciente de los ojos que los observaban a distancia. Un primer misil interrumpió las tareas de la familia antes que otro destruyera su vivienda.

"Papá, me muero, " le gritó Ibrahim a su padre que se precipitó desesperadamente a su lado. "Rápido, vamos, " Awaga le dijo a su esposa y a sus otros dos niños mientras llevaba en brazos el ensangretado cuerpecito de Ibrahim.

Pero antes de que pudieran llegar a la puerta, una lluvia de balas cayó sobre ellos.Una bala impactó en la pierna de la madre y otra en la cintura del padre. Los dos hermanitos asustados de Ibrahim corrieron para protegerse detrás de los escombros de su semidestruida vivienda.

Práctica de Tiro

Cuando cesaron los disparos, la familia pensó que su sufrimiento había terminado. Pero los soldados israelíes todavía no habían terminado. "Cuando los soldados se acercaron pensé que me iban a matar, " dijo Awaga que fingió estar muerto.

Pero ellos venían por mi pequeño, "dijo él ahogándose en sus amargos recuerdos. Un soldado se acercó al cuerpo de Ibrahim, lo tomó por su pierna y riendo lo hizo girar en el aire mientras otro disparaba su arma a la cabeza del niño muerto. Las carcajadas se hicieron más estruendosas cuando llevaron el cuerpo a un lugar más alto para comenzar su diversión.

Durante toda una hora el padre enmudeció sus gritos de dolor mientras veía cómo los soldados israelíes competían entre sí disparando sobre el cuerpo de su hijito muerto. "Ellos usaron su ensangrentado cuerpecito perforado por las balas para realizar una práctica de tiro."

"Con cada bala ellos tarareaban pronunciando palabras que yo no podía entender pero parecía que estaban en un estado de posesión y de éxtasis, como si estuvieran festejando." Cuando finalmente tuvieron bastante "práctica de tiro", los israelíes tomaron sus armas y abandonaron la vivienda. Pasaron cuatro días enteros antes de que los médicos de emergencia pudieran llegar hasta la familia para trasladarlos al hospital.

¿"Qué hizo mi hijo para merecer esto? " Awaga pregunta, sacudiendo su cabeza sin poder creer lo que sucedió. "Los israelíes masacraron a mi niño, no una ni dos veces, sino miles de veces."

Historias del genocidio en Gaza:La niña palestina Christine murió de miedo

L.L. Caro Para Kaos en la Red Hoy 2:44 20-01-09 www.kaosenlared.net/noticia/historias-genocidio-gaza-nina-palestina-christine-murio-miedo

Otra historia para difundir, para que lo ocurrido en Gaza no se olvide, no se perdone, y no caiga en el habitual pozo de impunidad al que estamos acostumbrados cada vez que se repite un genocidio como el vivido por el pueblo palestino.

El rugido de la artillería israelí acercándose cada vez más a su barrio pobre de Al-Remal, ahogado bajo las bombas por séptimo día consecutivo, fue demasiado para Christine. Tenía 14 años, era estudiante de décimo grado e hija de un médico. «Murió de miedo. Desde que comenzó la guerra sintió el peligro, sufrió desórdenes neuróticos e histeria como tantos otros niños. Cuando los F-16 volvieron a disparar los misiles aquel viernes, cayó al suelo aterrorizada por el ruido. Su padre intentó ayudarla, pero no pudo. La tomó en sus brazos para intentar reanimarla en el hospital, pero murió antes de llegar». Quien lo cuenta es el sacerdote que está al frente de la iglesia del patriarcado latino de Gaza, Manawei Mussallam, íntimamente vinculado a la pequeña comunidad cristiana ortodoxa a la que pertenece la familia de Christine, a quien no se pudo dar sepultura hasta cinco días después por la locura odiosa de la guerra. Era el 7 de enero. Día de Navidad para esa fe religiosa.
El diagnóstico forense de Christine apuntó a un ataque al corazón. Su pánico insuperable habla de la pérdida terrible de otra generación de niños gazatíes, que se consumen presa del terror a morir asesinados mientras duermen, de camino al colegio o confundidos en inmensos desórdenes psicológicos después de ver a sus padres impotentes e incapaces de proporcionarles seguridad.
Ya no hay nada que hacer por los al menos trescientos menores que han perecido en la Franja desde el 27 de diciembre. La tragedia son los pequeños que todavía están vivos y su sufrimiento espantoso: «El 36% de los niños de entre 8 y 12 años y el 17 de las niñas desea morir en los ataques del Ejército de Israel». Son datos del Programa de Salud Mental de la Comunidad de Gaza que dirige con tesón incansable el doctor Eyad al-Sarraj desde hace más de diecisiete años y durante los que ha podido documentar cómo las graves secuelas mentales acaban arrojando a los menores en brazos de los grupos armados en la edad adulta. «Un niño expuesto a tanta violencia se convierte en violento», ratifica el director del hospital psiquiátrico de Gaza, Aish Samur.
Traumas psicológicos

Los menores de Gaza dibujan tanques, puestos militares, se comen las uñas, tienen pesadillas y padecen dolores de causa desconocida, llantos y episodios de introversión. Un 47% sufre traumas psicológicos sin que sus familias se den cuenta. El 30% se niegan a dormir solos y arrastran una severa incontinencia urinaria. La operación 'Invierno caliente' lanzada por Israel en mayo aumentó un tercio el número de pacientes infantiles en los servicios de psiquiatría, donde tratan de sacarles de las escenas de muerte, de funerales, de excavadoras arrancando árboles, de niños asesinados, que martillean su imaginación.

La foto de Christine contraída y amortajada en los periódicos árabes de Israel ha sacudido conciencias, aunque nunca las suficientes. En el diario 'Al-Quds', el autor palestino Sam Bahour escribía: «Nunca te conocí y sin embargo te quiero como a mi hija de tu edad. Viviste 14 años en miedo permanente. Perdón porque ni yo ni el mundo actuamos con suficiente tiempo como para darte una vida normal, una vida digna»

Gaza... que el mundo sepa

Gaza... que el mundo sepa
Alberto Arce, desde Gaza
Fuente: Sodepaz

Hola a todos y todas,

Estoy bien. En estado de shock. Al igual que un millón y medio de personas, hemos decidido quedarnos. No hay periodistas europeos para contar la masacre, deliberada, anunciada, conocida, masticada, consultada y realizada
con el beneplácito de todos nuestros gobiernos. Toda la noche han seguido bombardeando. Hace 10 minutos otra vez, es aleatorio. Es un golpe de estado cruel contra un gobierno democráticamente elegido. La franja, encerrada durante dos años, sin medicamentos, ni electricidad, además es masacrada desde el aire. Hoy no tenemos agua. Desde hace una semana no hay pan. Los periodistas están bloqueados al otro lado de la frontera.


Quien quiere seguir siendo cómplice de Israel? Un saludo a Moratinos desde Gaza. Ayer en el telediario de tv3 en directo, me cortaron. Seguían insistiendo en mentir. No es un ataque contra hamas. Es un ataque contra un millón y medio de civiles. Indiscriminado.

Abrazos. Ahí tenéis mi teléfono palestino, llamadme cuando queráis, enviádselo a todo el mundo.
Cooperantes Internacionales que pueden ser contactados en la Franja de Gaza:
Alberto Arce, (Español, Inglés): 972 59 8786094

Con los ojos en Gaza Por Laura Ginsberg.

Integrante de la Agrupación por el Esclarecimiento de la Masacre Impune de la AMIA (APEMIA)
Cuando este 27 de enero se conmemore a las víctimas del Holocausto y se recuerde la resistencia del gueto de Varsovia contra el opresor nazi, en medio del aislamiento internacional al que fuera sometido por los Estados "amigos", los ojos de la humanidad seguirán puestos en la Franja de Gaza, aún sitiada, aislada y sometida por uno de los ejércitos más poderosos del mundo.
Este día de homenaje y recordación fue instituido por las Naciones Unidas, las mismas que facilitaron 22 días de bombardeos a la población palestina, y que aún no saben si sentarán al gobierno de Israel y a sus jefes militares en el banquillo de los acusados por crímenes de guerra y por violar la legislación internacional de ayuda humanitaria.
Los ojos de la humanidad miran y acompañan a las víctimas masacradas en Gaza y repudian las políticas terroristas del Estado de Israel en esa región.
La analogía con la conmemoración no es caprichosa: es el mismo Estado de Israel el que impulsó la recordación de las víctimas del nazismo y hoy propagandiza un incremento del antisemitismo global como producto de su invasión y del genocidio en Gaza. Toda una confesión, de parte de quien se supone iba a defender a los judíos del mundo para que no sufriéramos más este tipo de agresiones.
En nuestro país, donde se han movilizado decenas de miles contra esta criminalidad, no se ha registrado una sola víctima del supuesto "tsunami antisemita". De esta manera, DAIA y la Embajada de Israel vulgarizan el concepto de antisemitismo al confundir deliberadamente el repudio popular a los ataques del Estado de Israel con los ataques a individuos o a instituciones por su condición religiosa o étnica.
Cuando los hubo durante la dictadura militar y en la voladura de la AMIA, los ataques antisemitas fueron cometidos y/o encubiertos por el Estado argentino y sus fuerzas de seguridad. Israel fue entonces su cómplice en el encubrimiento y sostén internacional. Ahora, es el Estado argentino el que refuerza sus vínculos económicos (Tratado del Mercosur, Ley 26.437) y su complicidad política con el Estado de Israel en la masacre de Gaza.
El gobierno israelí manipula una acusación internacional de antisemitismo y pretende que los Estados enfrenten y prohíban la manifestación del repudio popular contra esta política de exterminio.
Un aspecto de esta manipulación consiste en descalificar y hasta ocultar que somos muchas las víctimas del terrorismo de Estado en AMIA que nos solidarizamos con las víctimas del terrorismo de Estado en Gaza. Resulta que ahora yo, que soy una damnificada de la masacre de la AMIA y de origen judío, que sé que el Estado argentino es responsable de este atentado en, al menos, su "encubrimiento agravado", y que defiendo a las víctimas de la criminalidad de los Estados en Israel y en la Argentina, me estaría aprovechando de esta situación internacional para provocar el antisemitismo hasta ahora encubierto y reprimido. ¡Un verdadero disparate! El nivel de manipulación para confundir a la opinión pública no conoce límites.
Los ojos de la humanidad están ahora más abiertos que nunca.
En el homenaje de este 27 de enero a las víctimas del Holocausto y en la recordación de la heroica resistencia del gueto de Varsovia, sumamos nuestra solidaridad para con el pueblo de Gaza que se resiste a vivir en un gueto, confinado entre muros y condenado a subsistir en condiciones infrahumanas.

La resistencia y la solidaridad entre pueblos se citan en Beirut Ingo Niebel

Beirut acoge desde ayer el Foro Internacional para la Resistencia, el Antiimperialismo y la Solidaridad entre los Pueblos. El derecho a la resistencia, de actualidad a raíz de la masacre israelí en Gaza, será durante dos días el eje de los debates entre los participantes procedentes de los cinco continentes.

Fuente: Gara

Desde el fracaso de la operación militar de Israel contra Hizbullah en julio de 2006, Líbano simboliza y demuestra que la resistencia contra el imperialismo, en general, y el sionismo, en particular, es posible. Hace dos años y medio, Tel Aviv intentó liquidar a la organización liderada por Hassan Nasrallah para eliminar así una alternativa política y social a las élites gobernantes en los demás países árabes de la región.

El objetivo final era limitar la influencia de Irán en la zona a su propio territorio nacional. El tiro le salió al Gobierno de Ehud Olmert por la culata: el más poderoso -y hasta entonces victorioso- ejército de la región tuvo que retirarse a pesar de su superioridad técnica. Los masivos bombardeos aéreos contra la población civil no lograron otra cosa que alimentar el espíritu de resistencia y consolidar la posición de fuerza de Hizbullah en el seno de la sociedad libanesa. Con este triunfo el proyecto político, social y religioso del movimiento chiíta se ha convertido en una alternativa real a la habitual sumisión de los gobiernos de la zona a las directrices que marca Washington.

Contrapeso al imperialismo

No sólo con respecto a los movimientos de la región, sino también desde el punto de vista internacional, cabe preguntarse qué aspectos que propiciaron la victoria de 2006 son aplicables a otros países, para forjar así un sólido contrapeso a la represión y sumisión instaladas por el imperialismo occidental. Éste no sólo habla inglés con acento estadounidense, sino también se expresa en una u otra lengua europea, ya que Bruselas ha definido en su Tratado de Lisboa que quiere ser una potencia comercial y política mundial. El precio lo han de pagar otros países, como Afganistán e Irak.

En este contexto surgió la idea de celebrar un foro internacional sobre la materia, que es la continuación de anteriores encuentros. La iniciativa partió del Consultive Center for Studies and Documentation (Centro Consultivo para Estudios y Documentación) de Beirut, junto a la Campaña Internacional contra la Ocupación Norteamericana y Sionista (Conferencia de El Cairo), al Foro Internacional Antiimperialista de Solidaridad entre los Pueblos (Conferencia de Calcuta) y a la Campa- ña Stop the War (Londres), y con la participación de la Asamblea Nacional para el Apoyo de la Opción de Resistencia (Líbano).

Los participantes han acordado debatir sobre «el derecho a la resistencia como principio fundamental de la cultura de resistencia y la decisión consciente a favor de la resistencia, inspirados por la batalla contra la ocupación estadounidense y sionista, el reconocimiento de las victimas, la herencia humana y las conquistas en la lucha y defensa de los derechos a la liberación, la libertad y la independencia, y contribuir, así, a que la opresión y la humillación de los pueblos definitivamente sea un capitulo cerrado de la Historia». Además, pretenden llevar a cabo en el ámbito internacional, en el marco de los foros sociales, una campaña por una globalización alternativa que incluya «el movimiento contra la ocupación israelí y en apoyo al pueblo palestino y a su derecho al retorno».

El Foro Internacional de Beirut tiene como objetivos principales la coordinación del desarrollo de estrategias y mecanis- mos para apoyar a la resistencia y la elaboración de alternativas prácticas contra las medidas impuestas por organismos internacionales como el Banco Mundial, la Organización Mundial del Comercio o el Fondo Monetario Internacional.

Canal israelí transmite la masacre de Gaza como si fuera un partido de fútbol Ingo Niebel

El programa Eretz Nehederet (Un país maravilloso) sale a antena cada semana en el Canal 2 de Israel con clips que ironizan sobre lo divino y humano. Pero el último programa de Un país maravilloso giró en torno a la guerra de Gaza y las burlas más sarcásticas se dedicaron al número de palestinos muertos en los intensos bombardeos del Ejército.

Los humoristas se ríen incluso de las explosiones de las guarderías. Un actor que representaba a un corresponsal militar transmitía al estudio constantemente el número de víctimas del conflicto. "Ya van quinientos contra cuatro", decía en alusión a los palestinos y los israelíes muertos.

Fuente: La haine.org

Poco después, iba incrementando el cómputo y añadía que aunque la victoria de Israel era abultada, no había que dormirse en los laureles sino que era necesario aumentar la diferencia. La narración imitaba la locución de un partido de fútbol e incluso celebraba cada explosión.
"Acabamos de bombardear un estudio de moda, ya tenemos 501 puntos", añadía al poco rato.
La cuenta iba creciendo y desde el estudio central se conectó con varias capitales europeas para que los corresponsales votaran el número de muertos palestinos que cada país estaba dispuesto a permitir.

Link del vídeo: http://es.youtube.com/watch?v=90hPppO1kNg

Ironía junto a Europa

Durante el programa, el supuesto corresponsal en Roma dijo que Italia podía permitir hasta 800 muertos. El corresponsal en Alemania dijo que su país estaba dispuesto a tolerar hasta 6.000 muertos. Las conexiones se hacían imitando las votaciones de Eurovisión y los muertos parecían los puntos que daba cada país.

El programa también realizó una conexión con la ciudad de Gaza para hablar con un miembro de Hamás que había montado un jardín de infancia para criar niños que luego se convertirían en escudos humanos.

"Tenemos niños muy majos que pueden servir de escudos humanos", decía el supuesto director del jardín de infancia. Además, el sarcasmo se cebó con las muertes infantiles: "Si vais a bombardear una zona civil, podéis avisarnos para que podamos enviar nuestras cámaras de televisión".

Bombas sobre guarderías
En otro pasaje, el ministro de Defensa, el laborista Ehud Barak, que es quien por ahora está sacando más rédito político a los ataques, anuncia que la siguiente fase de la operación será el bombardeo indiscriminado de la artillería, algo que todo indica que se ha realizado continuamente desde el 27 de diciembre.

Cuando el periodista le pregunta por un jardín de infancia que ha sido bombardeado y destruido, Barak responde: "¿Cómo queréis que sepamos que se trataba de un jardín de infancia? Los palestinos tenían que haber escrito en el tejado y en hebreo que era un jardín de infancia".

Con el Holocausto no bromean

Eretz Nehederet es sin duda el programa más iconoclasta de la televisión israelí. Pero nadie ha criticado que la ironía y el sarcasmo se dirijan esta vez hacia los centenares de víctimas palestinas de los bombardeos, que en su mayor parte son civiles.

"No estoy en contra del humor, ni del humor negro. Es un programa satírico y creo que no es ofensivo"(!), comenta la israelí Yael Guideon.

Sin embargo, en Israel el Holocausto es un tabú y los medios no bromean sobre ello.
"El programa refleja que más del 90% de los israelíes apoyan la guerra y seguramente también respaldan estos programas. Es una sociedad de sádicos y psicópatas", afirma el doctor Muhamad Yadala.

Las técnicas de manipulación de los Medios Manuel Freytas

Cómo los medios y las grandes cadenas ocultan la responsabilidad de Israel en la masacre de Gaza.
En este informe, describimos cómo las grandes cadenas internacionales y los medios locales hacen "desaparecer" la responsabilidad de Israel en el exterminio militar en Gaza, mediante técnicas de manipulación con el lenguaje (los títulos) y el "ocultamiento" de las víctimas y del escenario de destrucción (las imágenes).

A partir de ahora, Ud. va a mirar, leer, o escuchar las "noticias" sobre Gaza con otra "perspectiva" de análisis. Y va a entender porqué la masacre israelí en Gaza, el más inédito e impune genocidio militar de toda la historia moderna, no figura como "tragedia universal" de toda la humanidad.

Fuente: IAR-Noticias/Aporrea.org

El lenguaje manipulador

Tras 16 días de exterminio militar israelí, y cuando los muertos palestinos ya suman 910, los heridos 3.800, incluidos 270 niños asesinados y otros 1.100 heridos, la estrategia "informativa" de las grandes cadenas internacionales controladas por capitales sionistas se centra en un objetivo prioritario: Demostrar que en Gaza no hay una masacre militar israelí, sino un "conflicto" armado entre Israel y Hamás.

Hay una categoría central y un punto de abordaje común que guía los objetivos de la manipulación mediática con la matanza israelí de palestinos en Gaza:

Demostrar que en ese territorio no hay una masacre militar cometida por Israel, sino una "guerra" entre Hamás e Israel, nivelados en la misma capacidad de destrucción y de poder de fuego, aunque uno es una organización de guerrilla urbana y el otro es una superpotencia militar con poder nuclear.

Esto a su vez remite a una segunda categoría de lectura:

En Gaza no hay una operación sistemática de exterminio militar por aire, por mar y por tierra, de una superpotencia militar contra un pueblo indefenso, sino una guerra entre "iguales".

Se los equipara a Israel y a Hamás en la misma capacidad de destrucción militar y se omite mencionar quién es el atacante (el invasor) y quién el atacado (el invadido).

Lo que genera una tercera categoría de lectura:

En Gaza, tanto Israel como Hamás, son culpables de la violencia y de la muerte. Tanto Israel como Hamás matan por igual y en las mismas condiciones.

Se omite (se esconde), en primer lugar, la evaluación y discriminación de las cifras oficiales de los muertos causados por Israel, bajo la clasificación genérica de "muertos causados por el conflicto" en Gaza.

En 16 días de ataques por mar, por aire y por tierra, Israel mató a más de 900 palestinos, hirió o mutiló a más de 3.800, un 80% civiles, incluidos 270 niños asesinados y otros 1.100 heridos, según el último conteo oficial.

Cuando se difunde el total de muertos no se aclara (se esconde) que Israel con su bombardeos no sólo mató e hirió a miles de civiles sino que además destruyó la infraestructura y miles de viviendas en Gaza, creando además con el bloqueo una situación de catástrofe humanitaria que involucra a un millón y medio de personas.

Y no se precisa que Hamás, con sus ataques a las tropas invasoras y los disparos de cohetes artesanales, en proporción sólo mató a 5 civiles y 8 soldados israelíes, sin niños entre las víctimas, y sin destrucción masiva de las ciudades judías y sus infraestructuras.

Y ésta no diferenciación entre atacante y atacado, y la no discriminación de los emergentes de la destrucción (cuánto, cómo y porqué mata cada uno) conduce a una cuarta categoría cuya lectura es:

No hay que parar la masacre de Israel en Gaza, sino que hay que parar el "proceso de violencia en Gaza" generado por Israel y Hamás.

Este concepto manipulado (de "violencia de ambos lados") es el que utilizan tanto EE.UU., la Unión Europea o sus "socios árabes" para proponer un cese al fuego tapando la condición de invasor y la autoría militar de Israel en la masacre.

El emergente de la manipulación

Las cuatro categorías enumeradas (simultáneas e interactivas), conducen a una conclusión:
En Gaza no hay una masacre militar y un genocidio económico (por medio del bloqueo) perpetrado por el Estado de Israel, sino un "proceso de violencia irracional" que involucra tanto a Israel como a Hamás, con responsabilidad compartida por ambas partes.

En resumen, la manipulación con el lenguaje "informativo" genera un resultante:

A) La desaparición del rol de potencia atacante e invasora de Israel en Gaza (lo que le exime al Estado judío de ser acusado y condenado por crímenes de lesa humanidad).

B) La desaparición de la superioridad abrumante de su poder militar respecto de Hamás (que hace posible que se califique como "guerra" lo que claramente es una masacre militar unilateral).
C) La desaparición de la responsabilidad y autoría de Israel en la matanza masiva de civiles, en la destrucción física de Gaza y en la condena a su pueblo a padecer hambre y desesperación por la crisis humanitaria producto del bloqueo.

IIustremos estos tres niveles con un título, del jueves pasado, de la CNN (la cadena insignia que lidera la manipulación en el "mundo hispano-americano"): "Israel desobedeció a la ONU, y continúa su guerra con Hamás. Los muertos ya ascienden a 773".

En síntesis, los hoy 910 muertos palestinos (80% civiles) no fueron producidos por dieciséis días consecutivos de bombardeos judíos indiscriminados por aire, por mar y por tierra sobre Gaza y su población, sino por la "guerra" entre Israel y Hamás.

Títulos de este tenor, se reproducen por millones y a diario en el resto de las otras cadenas mediáticas internacionales (televisivas y escritas), que a la vez son "copiadas" por las cadenas y medios locales en los cinco continentes, que se convierten en "repetidoras" de las grandes centrales sionistas de la "información".

En consecuencia, y a modo de "producto final", lo que queda en el cerebro manipulado del televidente o lector masivo (integrado) que se "informa" por la TV y los diarios del sistema es:

"En Gaza hay una guerra. Y en la guerra se mata y mueren personas, de ambos lados".

De esta manera, las grandes cadenas y sus "repetidoras" locales a nivel planetario convirtieron al exterminio militar de Israel en Gaza (un genocidio impune y a cara descubierta, inédito en la historia de la humanidad), en una noticia "burocrática" que se repite en un título, en un texto de 20 palabras, y sin análisis ni comentarios, cada treinta minutos, y mezclada (sin ninguna valorización) con los "destacados" diarios sobre farándula, deportes y la vida de los ídolos.

Las técnicas de ocultamiento

A) Qué es una "cobertura especial"
Cuando sucede algún hecho trágico con muerte masiva de personas, las grandes cadenas mediáticas internacionales ponen en marcha lo que se denomina una "cobertura especial" del acontecimiento.

Esos procesos "informativos" se inician cuando suceden "actos terroristas", catástrofes naturales, accidentes, o hechos que involucren cualquier hecho de matanza y/o muerte masiva de personas.

B) Cómo se instrumenta una "cobertura especial"
Tomemos como ejemplo paradigmático a la CNN:

LA CNN lanza un título, "catástrofe", por ejemplo: "Atentado terrorista en Londres. Hay centenares de muertos y heridos".

El título se acompaña de una volanta titilante en la pantalla con la palabra ¡URGENTE!, y reiteradas "presentaciones" por parte del conductor "estrella" informando sobre más detalles del suceso.

Cuando consiguen las imágenes en "vivo" (provistas por las agencias internacionales), comienzan a mostrar el escenario de la destrucción: Muertos, heridos, daños de edificios, y precisiones del hecho "en vivo y en directo" realizadas por el corresponsal ya instalado en el área, que incluyen los testimonios de los sobrevivientes, entrevistas a representantes de los organismos oficiales y organizaciones civiles que actúan en el rescate de los heridos y de los muertos.

La "cobertura especial" en vivo, con todo el escenario montado de imágenes en vivo de la destrucción y testimonios de las víctimas, dura de acuerdo a la "valorización" de la información que hagan los directivos de las cadenas (por ejemplo, el 11-S en EE.UU. duró más de 24 horas, y algo parecido sucedió con el 11-M en España).

La "nivelación planetaria" de estas coberturas por medio de su rebote por las cadenas y medios locales en los cinco continentes "universaliza la tragedia" haciendo vivir a las mayorías del mundo el drama a la distancia como si fuera propio. Así impusieron el "miedo al terrorismo" a escala global.

Levantada la cobertura central "en vivo y en directo", las cadenas instrumentan "mini-coberturas en vivo y en directo" cada quince o treinta minutos, desarrollando la misma modalidad "informativa" pero en tiempo más limitado.

Durante los atentados del 11 M en España, y del 7J en Londres, los conductores "estrellas" de la CNN y de las otras grandes cadenas, permanecieron horas y horas trasmitiendo "en vivo" la catástrofe con imágenes y testimonios, que incluyeron relatos y condenas a los "autores" del atentado (léase, en este caso, el "terrorismo islámico").

En los dos acontecimientos "terroristas" juntos los muertos no alcanzaron las 300 personas.
Como detalle sobresaliente, hay que señalar que en Gaza, donde ya murieron (por asesinato militar) más de 900 personas, la tercera parte niños y mujeres, no mereció el tratamiento de "cobertura especial" por parte de las grandes cadenas y de los medios locales que "rebotan" y difunden sus coberturas en directo.

La "desaparición" de Gaza

El exterminio militar israelí en Gaza, que ya lleva 16 días de bombardeos consecutivos a poblaciones civiles bajo el argumento de destruir los "búnkeres terroristas" de Hamás, no tiene tratamiento de "cobertura especial" en las grandes cadenas y en los medios locales.

Esta matanza militar de Israel en Gaza, no figura como "información principal" relevante de las grandes cadenas, sino como un "agregado informativo" en el gran paquete de la información diaria.

Si bien está en todos los segmentos de noticias, no cuenta con la relevancia y la dinámica de una cobertura con corresponsales en vivo en los diferentes teatros de los hechos, con opiniones de testigos, protagonistas de la masacre, relatando la tragedia en vivo y en directo.
Las agencias internacionales de noticias obtienen y disponen de una información completa de la masacre (parte de la cual se encuentra en sus sitios de Internet) a través de testimonios, imágenes y videos que las cadenas compran pero no difunden en sus coberturas.

Mediante el ocultamiento del escenario de masacre y del testimonio de las víctimas, además de la deformación significante de los hechos y la descontextualización del lenguaje (llamar "conflicto" a lo que en la realidad es una masacre) las cadenas alteran la comprensión de lo que está sucediendo en Gaza y reducen su impacto en la psicología del televidente masivo.

En sus titulares las cadenas y los medios locales sustituyen las palabra masacre o invasión (lo que en realidad está sucediendo) por "conflicto", "enfrentamiento" o "guerra", quitándole a Israel su carácter de potencia agresora.

De igual forma sustituyen la palabra "asesinato" (lo que realmente está ejecutando Israel en Gaza) por "muerte de personas", lo que le quita el significante real al genocidio militar israelí realizado sobre poblaciones civiles desarmadas.

Por lo tanto, y a diferencia de los acontecimientos que son tratados con "cobertura especial", la masacre militar israelí en Gaza no está mediáticamente percibida como escenario de "tragedia universal" por las grandes mayorías que desarrollan su psicología, su conducta y sus emociones a partir de lo que ven en la pantalla del televisor.

La información (en las pantallas) sobre el exterminio militar en Gaza, no supera el marco y el formato de una información o "noticia" convencional, no se la valoriza como "tragedia universal", no tiene testimonios ni imágenes en vivo de las víctimas y de la destrucción, no tiene señalamientos claros del "autor" (como sucede con los atentados "terroristas"), no tiene presentadores comunicándose en "vivo" con los corresponsales en el terreno de los hechos, y está tratada casi sin relevancia mezclada con el resto del "paquete informativo" diario. Es más, en algunas cadenas, la información sobre Gaza va detrás de las noticias sobre deportes o acontecimientos de la farándula.

Durante los 16 días que ya lleva la masacre militar israelí en Gaza, ininterrumpida durante las 24 horas, las cadenas y los medios locales, dan carácter de "cobertura especial" a acontecimientos deportivos o a "tragedias individuales", mientras las "noticias" sobre el genocidio de Israel en Gaza permanecen sin trascendencia -casi burocráticamente- encasilladas en el "paquete general" diario de la información.

En la Argentina, para citar un ejemplo, los canales de cable -encabezados por Todo Noticias del Grupo Clarín- que no difunden imágenes en vivo de la destrucción judía en Gaza, y que esconden sistemáticamente todo vestigio y señal de los muertos y del testimonio de las víctimas, armaron una "cobertura especial" en vivo con el Rally Dakar, que insumió decenas de horas de transmisión, con testimonios y presencia de autos y participantes.

La misma tónica "informativa" adoptó la CNN en español, que evita, también sistemáticamente, mostrar "en vivo" a los cadáveres y los testimonios de las víctimas de la masacre militar en Gaza.

El "producto final"

En síntesis, en Gaza, donde ya murieron más de 900 personas y los heridos ascienden a 3800 (un tercio del total, mujeres y niños), un pueblo en catástrofe humanitaria que carece de los recursos (alimentarios, sanitarios y de infraestructura) para sobrevivir, y donde ciudades enteras y la capital fueron literalmente "demolidas" por los misiles y las bombas de racimo israelíes, los jerarcas de la CNN y de las grandes cadenas decidieron ("valorizando" la información) que ese acontecimiento de muerte y tragedia no amerita una "cobertura especial". Que, en términos del poder manipulador televisivo a escala global, equivale a decretar a Gaza como "inexistente" en el marco valorativo de las grandes tragedias humanas producidas por exterminio militar.

¿Qué tendrá de "diferente" la sangre de los niños, mujeres y hombres palestinos que no ameritan carácter de "tragedia universal" (o de Holocausto) para las grandes cadenas y medios de comunicación que hegemonizan lo que es y lo que no es noticia a escala global?

¿Por qué para el capitalismo sionista judío que hegemoniza (estadísticamente probado) la dirección y el paquete accionario de los grandes medios y cadenas televisivas a escala global, Gaza, Irán, Líbano, y en general todo el mundo islámico, revisten una categoría humana diferente a la de los miles de millones de "incluidos" en el sistema capitalista controlado desde EEUU y las potencias europeas centrales?.

Por ahora, nos quedamos con una verificación concreta:

Para la mayoría de los gobiernos y las sociedades del "mundo globalizado", la masacre militar israelí en Gaza no es tal sino un conflicto entre Israel y Hamás que genera muertos y heridos. Y punto.

Gaza, sólo es un título periodístico y un conjunto de imágenes cristalizadas (detenidas) que de vez en cuando se cruzan por la retina de los televidentes "incluidos" en el mundo capitalista que las miran casi con indiferencia.

Técnicamente, el genocidio de Israel y la tragedia humana de Gaza, fueron "borrados" del programa y del sistema operativo cerebral de las grandes masas sujetas a la dinámica existencial de "miro la televisión y luego existo".

En consecuencia, para los que portan el microchip cerebral del sistema capitalista (masivamente incorporados como "opinión pública" mundial), Gaza no existe.

Esto explica porqué el Estado sionista y las comunidades judías del mundo pueden decir (sin que nadie rodee sus casas y sus embajadas, o boicotee y bloquee sus bancos y empresas en el planeta) que "Israel sólo se está defendiendo del terrorismo en Gaza".

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Manuel Freytas es periodista, investigador y analista, especialista en inteligencia y comunicación estratégica. Es uno de los autores más difundidos y referenciados en la Web.

Gaza: una franja ensangrentada Pablo Jofré leal

En medio de la más severa y creciente espiral de violencia desde el fin de la Intifada de Al Aqsa y la lucha contra Hezbolá el año 2006; Israel comenzó su campaña militar de invasión a la Franja de Gaza, causando hasta hoy cerca de 900 muertos palestinos, gran parte de ellas civiles: mujeres, ancianos y niños.

Shalom (paz en hebreo) Asalaam Aleikum (la paz sea contigo en Árabe) son conceptos que carecen de significado en el escenario de guerra y desolación en que se encuentra la minúscula Franja de Gaza. Territorio donde se apiñan miserablemente un millón y medio de palestinos; condenados a vivir del contrabando con Egipto y de las dádivas internacionales. Una tierra donde no parece haber cabida para el diálogo o la búsqueda de la paz. ¿Los responsables?: Sharon, Hamas, la Yihad islámica, el Mossad, Shin Bet, los colonos judíos, el ejército o tal vez algún Shahid (mártir palestino). El nombre a estas alturas, es una mera anécdota en el recuento de dolor y muerte, que incluye a 43 niños aplastados bajo los escombros de tres escuelas administradas por la ONU y bombardeadas por tanques israelitas.

ESCENARIO DIMINUTO PARA UNA AGRESIÓN MAYÚSCULA

Palestina vive en estos días el horror de ir desangrándose en la lucha de dos pueblos condenados a vivir juntos, compartir y venerar los mismos lugares santos, caminar por las calles de Jerusalén o Al Qods según se trate de judíos o palestinos. Beber de las mismas fuentes quiéralo Alláh o Jehová. Sometidos a la muerte sin anuncio, en forma de cohete casero de Hamas o desde la torreta de un tanque, de una patrullera costera o de un avión israelí.

El 3 de enero, después de una semana de intensos bombardeos, tanques e infantería israelíes penetraron en la Franja de Gaza, en una ofensiva terrestre total. Fuentes militares de Israel, a través del Ministro de Defensa Edhud Barak, señalaron que esta operación militar "No será fácil y no será breve". Por su parte la canciller israelí Tzipi Livin afirmó que esta operación militar es justificada pues "Israel usa la fuerza en legítima defensa. No luchamos contra los palestinos sino que contra Hamas" Ante la enorme cantidad de víctimas civiles la canciller Livin señaló "es cierto que hay muchos civiles involucrados, pero estamos tratando de evitarlo".

La intención de la política hebrea no se está logrando, pues las víctimas, principalmente civiles – 300 niños entre ellos – se acercan al millar con más de tres mil heridos. El balance israelita arroja en su bando cinco soldados muertos (dos de ellos por "fuego amigo") y unos cuantos heridos civiles. Para el analista político Esteban Silva "Chile debe condenar enérgicamente esta criminal agresión militar en contra del pueblo palestino, sólo comparable con medidas de exterminio como las ejecutadas por el nazismo. Sólo la unidad palestina y la resistencia de la comunidad internacional, podrá detener esta grave agresión y holocausto en curso".

El 31 de diciembre, el Consejo de Seguridad de la ONU celebró una reunión de emergencia en base a un plan de paz propuesto por Libia y 22 países árabes, que fue desechado de inmediato por el fiel aliado de Israel: Estados Unidos, que consideró dicha propuesta como "desequilibrada" que buscaba obligar a Israel a detener sus ataques militares contra Gaza. El proyecto de resolución exigía la protección para la población civil en la Franja y la apertura de puntos de cruce, para la entrada de la ayuda humanitaria. Al cierre de esta edición, Israel decidió suspender por tres hora diarias los bombardeos, para permitir el abastecimiento de la población. Ahora se está discutiendo un plan de paz preparado por Francia y Egipto. Todo ello en un escenario donde el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) calificó la situación en el área de conflicto como una crisis humanitaria de grandes proporciones, señalando que la vida en ese enclave se ha hecho "insostenible".

TROPEZAR DE NUEVO CON LA MISMA PIEDRA

La actual situación en Palestina es probablemente la peor desde la guerra árabe-israelí de Yom Kippur en 1973 y a pesar de su gravedad es improbable una desestabilización general en la región. Jordania, Egipto, Siria e incluso Irán, no están en condiciones de iniciar ningún tipo de disputa contra el gobierno israelita.

Para el analista Michel Chossudovsky de The Global Research "Los bombardeos aéreos y la actual invasión de Gaza es una empresa que forma parte de una agenda militar y de inteligencia más amplia, formulada por primera vez en 2001, bajo el nombre de "Operación Venganza Justificada", conocida también como "Plan Dagan", en referencia al general en retiro Meir Dagan, que dirige actualmente el Mossad y que tenía el objetivo de destruir la Autoridad Palestina y crear "cuatro cantones" palestinos, con gobiernos en cada uno de ellos" . La estrategia militar israelí a lo largo de esta última década, ha sido el implementar ese plan y que requería, según lo expresa el analista Ellis Shulman "una invasión del territorio palestino, con la misión claramente definida de destruir la estructura de la dirigencia política y militar palestina"

Yusuf Fernández, Editor Internacional de WebIslam afirma que "Washington e Israel no aceptaron la victoria de Hamas en las elecciones del 2006. En junio de 2007, las fuerzas de seguridad de esos países, promovieron un golpe de estado para derribar el gobierno de unidad nacional que Fatah y Hamas habían creado durante sus negociaciones en Yeddah. El golpe fracasó y desde entonces la Administración Bush respaldó también el asedio israelí de la Franja de Gaza, que ha impedido a menudo a 1,5 millones de palestinos recibir comida, combustible, medicinas y otros productos. El objetivo de este bloqueo era el de hacer que la vida de la población de Gaza fuera tan intolerable que llevara a la caída de la Administración de Hamas"

Para Tariq Ali, analista de The Guardian, el asalto a Gaza, planificado durante seis meses y ejecutado con perfecta sincronización, fue diseñado principalmente para ayudar a los partidos israelíes a triunfar en sus próximas elecciones. Los palestinos asesinados son poco más que un triunfo electoral en la lucha desvergonzada entre la derecha y la extrema derecha en Israel. Washington, como es habitual, culpó a los palestinos pro-Hamas de la actual situación, con Obama y Bush cantando la misma partitura del grupo de presión pro-israelita de EE.UU. Los políticos de la UE, que sabían del castigo colectivo infligido a Gaza, se convencieron de que los ataques de cohetitos de Hamas habían "provocado" a Israel, pero instaron a "ambas partes" para poner fin a la violencia, con efectos nulos. El dictador apolillado Mubarak en Egipto y los islámicos preferidos de la OTAN en Ankara, ni siquiera se tomaron la molestia de hacer una protesta simbólica llamando a sus embajadores de Israel". Para Alí, un producto de este último ataque será crispar a las comunidades musulmanas a lo largo del mundo y aumentar su apoyo.

El derramamiento de sangre en Gaza obliga al análisis, respecto a la responsabilidad israelita, como también la de los propios palestinos. Uno de los hechos que precisa ser reconocido es que la ANP ya no existe y que los Acuerdos de Oslo, por la propia impericia de la dirigencia palestina ha sido un desastre para sus intereses. "La OLP, sostiene Alí, una vez el depositario de la esperanza Palestina, se convirtió en poco más que un suplicante del dinero de la UE. La victoria electoral de Hamas fue tratada como un signo ominoso del fundamentalismo creciente, y un aterrador golpe a las perspectivas de paz con Israel. Las presiones diplomáticas y financieras se pusieron en marcha para forzar a Hamas a que adoptase las mismas políticas de aquéllos a quienes habían derrotado en las urnas"

En ese escenario, Hamas, tras años de corrupción de la ANP y sin los grandes recursos de Al Fatah, comenzó a establecer clínicas, escuelas, hospitales, formación profesional y programas de bienestar para una población palestina carenciada. Sus jefes y cuadros en forma sencilla daban respuesta a las necesidades cotidianas, generando una base política que los nutre y mantiene, le guste a o no al análisis político occidental y "al cacareo diario de los versos coránicos" como afirman en Gaza. La agresión a la Franja de Gaza ha reafirmado el papel dirigente de Hamas y debilitado a la clase política heredera de Arafat y a los regímenes corruptos árabes como Egipto y Jordania.

Poco antes de su muerte el año 2003 el intelectual palestino y profesor de la Universidad de Columbia, Edward Said señaló una idea más vigente que nunca "Si bien es cierto que la propia política errática y denigrante de la Autoridad Nacional Palestina trajo consecuencias funestas para la lucha palestina, no es menor el papel jugado por los grupos sionistas y sus actividades en Estados Unidos, cuyos puntos de vista sobre el Medio Oriente, son incluso más extremos que aquellos del Likud israelí".

Las palabras de Said hacen referencia al lobby más temido y poderoso de Washington: el American Israel Public Affairs Committee (AIPAC) que coordina su trabajo a través del Instituto para la Política del Medio Oriente con diplomáticos, empresarios, militares, políticos y líderes de opinión estadounidenses, que entregan recursos financieros a raudales, con buenas relaciones y unidad de propósitos. Su manejo experto del cabildeo ha logrado mantener a lo largo de los años la millonaria ayuda exterior a los gobiernos israelíes – con cerca de 3.000 millones de dólares anuales – y sobre todo, el silencio cómplice de las potencias occidentales y de la ONU a las políticas de agresión israelitas. Refrendado esto por las del presidente de la Asamblea General de la ONU, el nicaragüense Miguel D'Escoto, quien aseguró que el Consejo de Seguridad debe demostrar su capacidad para mediar en el conflicto de Gaza "Nuevamente el mundo está viendo la disfunción total del Consejo de Seguridad, que cuando se trata de Israel los intereses norteamericanos y británicos impiden actuar".

CAUSAS MÁS QUE AZARES

La Babel israelí y esta idea que perdura de crear un Estado mediante el vínculo de la fe, es una de las respuestas que permite comprender el conflicto con los palestinos, provocando graves problemas de identidad, entre los intereses de los colonos en los asentamientos y el resto de la sociedad israelí llámense askenasis laicos, falashas, palestinos israelíes, sefardíes, ultraortodoxos, judíos rusos, drusos o cristianos. Esa Babel se enfrenta al legítimo propósito del pueblo palestino por ejercer su derecho al retorno de su propia diáspora y de ocupar un territorio que también es suyo. Estos intereses disímiles es lo que tiene a los bandos en pugna en un diálogo de sordos

A las ideas anteriores se une el agua como arma de presión, que explica el expansionismo israelí y su persistente negativa a devolver los territorios ocupados. Israel controla las fuentes de agua de la región, que se encuentran ubicadas, fundamentalmente, en el río Jordán y en los pozos acuíferos subterráneos de Gaza y Cisjordania. Es este factor hídrico el que evidencia, igualmente, el cambio de actitud de los países antaño enemigos y hoy negociadores como Jordania, amenazado por Israel de disminuirle un 60% de la entrega de agua. Israel monopoliza, a través de la única compañía de explotación y distribución de agua (Mekorot), los escasos recursos hídricos de esta región. Israel consume unos 600 m3 de agua por habitante al año frente a los 300 m3 de Jordania y los cien que se les permite a los palestinos. Al tema cantidad, se une la calidad y el precio del agua, en que a los palestinos se les cobra hasta tres veces el valor que pagan los israelíes. Esto es todavía más alarmante en Gaza, donde los palestinos han pagado hasta 20 veces más que los subsidiados colonos judíos.

La única solución viable y posible para este conflicto, es el inmediato cese de las hostilidades y ofrecer lo que innumerables planes de paz no ha podido llevar a cabo: el reconocimiento de todos los Estados árabes a Israel a cambio del repliegue de las tropas de este país a las fronteras existentes el año 1967 donde se incluye Jerusalén Este, Gaza y Cisjordania. También establecer un Estado palestino con capital en Jerusalén Este con control israelí del barrio judío en la ciudad antigua. Esto, que parece "pragmático" es, letra a letra, tan viejo como las guerras. Un "remake" de las añejas y nunca respetadas resoluciones condenatorias de Naciones Unidas a Israel, los acuerdos de la Conferencia de Madrid del año 1991, los acuerdos de Oslo del año 1993 o las tratativas de la Cumbre de Camp David de julio del año 2000.

Como cruel paráfrasis del cuento ruso de Pedrito y el Lobo, el conflicto palestino-israelí sigue con su apología respecto a que la paz viene, pero se vuelve a ir en un mar de sangre. Con la invasión militar de la Franja de Gaza, la paz de la región se ve cada día más lejana, con escasa posibilidad de sobrevivencia para miles de palestinos y algunas decenas de israelitas; con una ofensiva bélica que va concretando el plan final que se está tejiendo para esa región: la creación de un mini-Estado al estilo de los bantustanes, un nuevo apartheid bajo la bandera de la estrella de David.

La lógica del análisis político, no siempre la más adecuada para entender la intríngulis medioriental, indica que tarde o temprano Israel deberá resignarse a aceptar el nacimiento del Estado palestino y retirarse de los territorios ocupados y a los Palestinos renunciar a la reivindicación del retorno inmediato de los cuatro millones de refugiados y condescender a mantener una presencia simbólica en Al Qods. Opiniones van y vienen y lo único concreto son más y más ceremonias fúnebres en un territorio codiciado por árabes y judíos, escenario de cuatro guerras declaradas y otras tantas anónimas. Causa de miles de muertes en ambos bandos y la desestabilización en una región explosiva, donde se ve pasar la muerte en espera de una paz que no arriba.

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Pablo Jofré Leal es periodista chileno.

“¡Mentira! ¡Mentira! ¡No tiene perdón!” Juan Gelman

Es un verso del tango “Mentira” que Celedonio Flores y Francisco Pracánico compusieron en 1932. Carlos Gardel lo cantaba sin falsa emoción y sin el teatro que propinan hoy algunos tangueros. Se trata, claro, de un hombre que apostrofa a la mujer que lo engañaba y no por eso se privaba de llorar de amor en sus brazos. La frase es desde entonces, y aun antes, aplicable a numerosos políticos y gobiernos del mundo. Por ejemplo, al gobierno israelí y a su primer ministro, Ehud Olmert.

Fuente: Página/12 http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-118238-2009-01-15.html

Llevan a cabo en Gaza una matanza que ha causado ya la muerte de casi mil palestinos y miles de heridos: un 60 por ciento eran o son civiles y casi 300 fueron niños. El pretexto: defensa propia en razón de los continuos ataques con misiles de Hamas. La verdad: “Cualquiera que observe con honestidad el desarrollo de los acontecimientos en los dos últimos meses descubrirá que los (cohetes) Kasam tienen un contexto. Fueron casi siempre arrojados después de operativos de asesinato de las FDI, y de éstos hubo muchos. La pregunta de quién empezó no es infantil en este contexto. Las FDI volvieron a las operaciones de exterminio y en gran escala. Y su consecuencia fue el incremento de los disparos de Kasam”. Este análisis puede leerse en el diario israelí Ha’aretz del 9 de febrero del 2007. Está firmado por Gideon Levy, el periodista también israelí que Vargas Llosa elogió por su valentía intelectual.

Otra del gobierno Olmert: Hamas no respetó la tregua acordada a mediados de junio del 2008 que expiraba en diciembre. La verdad: tropas israelíes la rompieron el 4 de noviembre irrumpiendo en Gaza y matando a seis palestinos (www.guardian.co.uk, 5-11-08). Las FDI volvieron a romper la tregua el 17 de noviembre matando a un líder de Hamas. La respuesta palestina: más Kasam. Y luego: Tel Aviv no se cansa de repetir que Hamas usa escudos humanos para combatir a las FDI. Parece que es al revés. Un comunicado de Amnesty International detalla: “Nuestras fuentes en Gaza informan que soldados israelíes han entrado y tomado posición en varios hogares palestinos, obligando a las familias a permanecer en la planta baja mientras ellos usan el resto de sus casas como base militar y en posición de francotiradores” (www.amnesty.org, 7-1-09).

La Franja de Gaza contiene en sus 360 kilómetros cuadrados a una población de casi millón y medio de palestinos. Si los cohetes de Hamas llegaran a Tel Aviv y alcanzaran el barrio residencial donde está ubicado el Ministerio de Defensa israelí, ¿sería justo decir que Israel usa escudos humanos para defenderse de los Kasam? Vaya una observación interesante de Malcolm Smart, miembro del Programa de Amnesty para el Medio Oriente y el norte de Africa: “El ejército israelí tiene plena conciencia de que los tiradores palestinos suelen abandonar el lugar después de haber disparado. Cualquier ataque de represalia contra esas casas dañará a los civiles, no a los tiradores, en la mayoría de los casos”. El comunicado de Amnesty agrega que la ocupación de casas palestinas por soldados israelíes ha sido una práctica frecuente en el pasado y que “en otros casos, han obligado a civiles palestinos, a punta de fusil, a entrar delante de ellos en los edificios donde temían que pudiera producirse un ataque”.

El gobierno Olmert justificó el bombardeo de una escuela de la ONU instalada en el campo de refugiados de Jabaliya arguyendo que desde allí habían hecho fuego contra sus efectivos. Después de unos días, tuvo que rectificar: las FDI habían cañoneado sin más trámite a quienes se guarecían en la escuela matando a 40 civiles. Lo mismo sucedió –entre otros– con el ataque a un camión que transportaba gas y no Kasam, como Tel Aviv adujo al principio. En verdad, Israel desató una guerra de exterminio.

“¿Sucede acaso que esta guerra es el laboratorio de los fabricantes de muerte? ¿Acaso es posible que en el siglo XXI se pueda encerrar a un millón y medio de personas y hacer de ellas todo lo que se quiera llamándolos terroristas?” Es una pregunta que formularon los médicos noruegos Mads Gilbert y Erik Fosse –hace 20 años que prestan asistencia en Gaza como miembros de la ONG Norwac– al salir de la Franja vía Egipto (Le Monde, 12-1-09). Habían atendido a “víctimas de lo que tenemos todas las razones para pensar que se trata de un nuevo tipo de arma, ensayada por los estadounidenses, conocida con el acrónimo DIME (Explosivo de Metal Inerte Denso)”. Los DIME son poderosos, su radio de acción es de 10 metros, a quien está a tres metros de la explosión le parten el cuerpo en dos, a los ocho, le cortan limpiamente las piernas.

Human Rights Watch ha denunciado el posible empleo de bombas de fósforo blanco contra los palestinos. Son de uso militar permitido para crear cortinas de humo, pero no en zonas pobladas, según establece el convenio de la ONU sobre armas convencionales (www.hrw.org, 10-1-09). Preguntado al respecto, el mayor israelí Avital Leibovitch aseguró que las FDI “no utilizan armas que el derecho internacional prohíbe. Otras naciones usan bombas de fósforo y tenemos el derecho a no hacer comentarios sobre el tema”. Es cierto, las FDI tienen ese derecho. Y los palestinos, el derecho a no ser desollados vivos. Ni siquiera a ritmo de tango.

Operación Plomo Impune Eduardo Galeano

Para justificarse, el terrorismo de estado fabrica terroristas: siembra odio y cosecha coartadas. Todo indica que esta carnicería de Gaza, que según sus autores quiere acabar con los terroristas, logrará multiplicarlos.

Fuente: Brecha http://www.brecha.com.uy/alter/index.php?option=com_content&task=view&id=585&Itemid=70

Desde 1948, los palestinos viven condenados a humillación perpetua. No pueden ni respirar sin permiso. Han perdido su patria, sus tierras, su agua, su libertad, su todo. Ni siquiera tienen derecho a elegir sus gobernantes. Cuando votan a quien no deben votar, son castigados. Gaza está siendo castigada. Se convirtió en una ratonera sin salida, desde que Hamas ganó limpiamente las elecciones en el año 2006. Algo parecido había ocurrido en 1932, cuando el Partido Comunista triunfó en las elecciones de El Salvador. Bañados en sangre, los salvadoreños expiaron su mala conducta y desde entonces vivieron sometidos a dictaduras militares. La democracia es un lujo que no todos merecen.

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Son hijos de la impotencia los cohetes caseros que los militantes de Hamas, acorralados en Gaza, disparan con chambona puntería sobre las tierras que habían sido palestinas y que la ocupación israelita usurpó. Y la desesperación, a la orilla de la locura suicida, es la madre de las bravatas que niegan el derecho a la existencia de Israel, gritos sin ninguna eficacia, mientras la muy eficaz guerra de exterminio está negando, desde hace años, el derecho a la existencia de Palestina.

Ya poca Palestina queda. Paso a paso, Israel la está borrando del mapa.

Los colonos invaden, y tras ellos los soldados van corrigiendo la frontera. Las balas sacralizan el despojo, en legítima defensa.

No hay guerra agresiva que no diga ser guerra defensiva. Hitler invadió Polonia para evitar que Polonia invadiera Alemania. Bush invadió Irak para evitar que Irak invadiera el mundo. En cada una de sus guerras defensivas, Israel se ha tragado otro pedazo de Palestina, y los almuerzos siguen. La devoración se justifica por los títulos de propiedad que la Biblia otorgó, por los dos mil años de persecución que el pueblo judío sufrió, y por el pánico que generan los palestinos al acecho.

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Israel es el país que jamás cumple las recomendaciones ni las resoluciones de las Naciones Unidas, el que nunca acata las sentencias de los tribunales internacionales, el que se burla de las leyes internacionales, y es también el único país que ha legalizado la tortura de prisioneros.

¿Quién le regaló el derecho de negar todos los derechos? ¿De dónde viene la impunidad con que Israel está ejecutando la matanza de Gaza? El gobierno español no hubiera podido bombardear impunemente al País Vasco para acabar con ETA, ni el gobierno británico hubiera podido arrasar Irlanda para liquidar a IRA. ¿Acaso la tragedia del Holocausto implica una póliza de eterna impunidad? ¿O esa luz verde proviene de la potencia mandamás que tiene en Israel al más incondicional de sus vasallos?

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El ejército israelí, el más moderno y sofisticado del mundo, sabe a quien mata. No mata por error. Mata por horror. Las víctimas civiles se llaman daños colaterales, según el diccionario de otras guerras imperiales. En Gaza, de cada diez daños colaterales, tres son niños. Y suman miles los mutilados, víctimas de la tecnología del descuartizamiento humano, que la industria militar está ensayando exitosamente en esta operación de limpieza étnica.

Y como siempre, siempre lo mismo: en Gaza, cien a uno. Por cada cien palestinos muertos, un israelí.

Gente peligrosa, advierte el otro bombardeo, a cargo de los medios masivos de manipulación, que nos invitan a creer que una vida israelí vale tanto como cien vidas palestinas. Y esos medios también nos invitan a creer que son humanitarias las doscientas bombas atómicas de Israel, y que una potencia nuclear llamada Irán fue la que aniquiló Hiroshima y Nagasaki.


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La llamada comunidad internacional, ¿existe?

¿Es algo más que un club de mercaderes, banqueros y guerreros? ¿Es algo más que el nombre artístico que los Estados Unidos se ponen cuando hacen teatro?

Ante la tragedia de Gaza, la hipocresía mundial se luce una vez más. Como siempre, la indiferencia, los discursos vacíos, las declaraciones huecas, las declamaciones altisonantes, las posturas ambiguas, rinden tributo a la sagrada impunidad.

Ante la tragedia de Gaza, los países árabes se lavan las manos. Como siempre. Y como siempre, los países europeos se frotan las manos.

La vieja Europa, tan capaz de belleza y de perversidad, derrama alguna que otra lágrima, mientras secretamente celebra esta jugada maestra. Porque la cacería de judíos fue siempre una costumbre europea, pero desde hace medio siglo esa deuda histórica está siendo cobrada a los palestinos, que también son semitas y que nunca fueron, ni son, antisemitas. Ellos están pagando, en sangre contante y sonante, una cuenta ajena.


(Este artículo está dedicado a mis
amigos judíos asesinados por las
dictaduras latinoamericanas que
Israel asesoró).